Reseña: Soy su silencio (Jordi Lafebre)

Chispa. Hay obras que la tienen y obras que no. Y, desde luego, la de Jordi Lafebre la tiene, y mucha. Si ya había quedado más que encantado, casi diría que enamorado, con Los buenos veranos, la obra que co-creó junto a Zidrou, la obra que hoy tenemos entre manos no hace más que confirmar que estamos ante uno de los autores mejor en forma de la actualidad en Europa: tanto por un guion modélico como por un dibujo sensacional, Lafebre nos regala una obra divertida, cáustica y mordaz como pocas, con uno de los dibujos más sexys que he visto en mucho tiempo.

Pero vayamos por partes. Si este cómic nos empieza enganchando es por su protagonista: Eva Rojas es lista, sensual, irónica. Una psiquiatra un tanto particular que es capaz de parlamentar con las mujeres (difuntas) de su familia, quienes no se ahorran ninguna réplica o consejo, incluso en las situaciones límites en las que se verá envuelta Eva. Es un personaje único e hipnotizante al que le acompaña un diseño estupendo: pelo corto, tatuajes, gafas de sol, moda chic… Absolutamente todo en ella está pensado para convertirse en el pilar de la obra y, la verdad, es que aguanta todo el peso de manera estupenda y sin trastabillar en ningún momento.

Pero también juega a su favor la historia: Eva es invitada por uno de sus pacientes a presenciar la lectura del testamente en vida de la matriarca de la familia Monturós, unos vinicultores que guardan más de un secreto… y más de un muerto bajo la alfombra. Por supuesto, nada irá como debería y el asesinato de uno de los miembros de la familia dará al traste con los planes. Aún más cuando la principal sospechosa sea Eva… Y aunque nada en el desarrollo de la obra sea tremendamente original y algunas situaciones estén un poco pilladas con pinzas, lo cierto es que el ritmo nunca decae y siempre tienes ganas de continuar adelante, de leer una página más, una viñeta más.

En parte, claro está, por la ambientación: Barcelona se convierte en un personaje más, secundario, sí, pero siempre presente. Sobre todo por cómo Lafebre ha sido capaz de captar su luz y sus colores, no sólo por cómo sabe retratar sus calles y edificios más célebres y reconocibles: al ambiente marítimo mediterráneo le va como anillo al dedo a esta historia de asesinatos y conspiraciones familiares.

Como podéis intuir, el dibujo es sensacional: fresco, colorido, con muchísima luz y con un diseño de la protagonista que, como ya he dicho, me parece glorioso. Con un estilo totalmente reconocible para aquellos que disfrutaron de Carta blanca, Lafebre se consolida como un artista con gran personalidad y un estilo propio inconfundible.

Así que, ya sabéis, si tenéis ganas de disfrutar de un thriller divertido, con una trama que engancha, una ambientación de lujo y una protagonista deliciosa, Soy su silencio, editada por Norma, os va a enamorar de pies a cabeza.