Reseña: Ranma 1/2, vol. 1 (Rumiko Takahashi)

Rumiko Takahashi necesita pocas o ninguna presentación, pues se trata de una de las mangakas más importantes de la historia y es la autora de una extensa obra de gran calidad. Y, posiblemente, uno de los grandes hitos en su carrera sea este Ranma 1/2, un manga que completó en 38 tomos (con 407 capítulos a sus espaldas) y que, ahora, Planeta recupera en catalán (y con una excelente traducción). De hecho, desde hace un tiempo a esta parte, Planeta está trayendo la obra de Takahashi a la actualidad publicando obras tan importantes como Inuyasha, Mermaid Saga, Mao… Y es de agradecer que podamos acceder a todas estas obras, y en ediciones más que notables, que son cruciales para el manga.

Ranma 1/2 situó, tras dos grandes éxitos como fueron Urusei Yatsura y Maison Ikkoku, a Takahashi en la cresta de la ola: si ya era famosa antes, este manga la consagró de manera más que merecida. Y no es para menos. De hecho, para los de mi generación es difícil no recordar las tardes en las que volvíamos a casa para merendar y ver el capítulo del anime de Ranma 1/2. Y aunque todos sabemos ya a estas alturas de qué iba, no está de más que lo recuerde: Ranma y su padre, Genma, regresan a Japón, donde se instalan con la familia Tendô. Allí, nuestro protagonista conocerá a Akane, con quien se prometerá pese a las reticencias de ambos. Pero, hay una pequeña peculiaridad con Ranma (y su padre), cuando se moja con agua fría se convierte en mujer y solo puede volver a su estado original si se le rocía con agua caliente. Esto, por descontado, será el núcleo de la trama y la causa de mil y una confusiones que generarán tanto situaciones cómicas como subidas de tono (sí, hay unos cuantos desnudos parciales en este manga).

Una de las grandes cualidades de Takahashi es el de crear todo un gran abanico de personajes (de hecho, creo que este es el manga de la autora donde más personajes aparecen) con los que iremos viviendo una cantidad ingente de momentos hilarantes y románticos que nos harán soltar más de una carcajada y suspirar por el futuro de nuestros protagonistas. En este volumen, aparte de los personajes ya citados, conoceremos a Ryoga y Kunô, dos de los personajes que se interpondrán en el romance entre Akane y Ranma, y que van a tener más de una confusión amorosa con las transformaciones de Ranma. Y sí, como ya he dicho, el componente erótico es una de las señas de identidad de esta obra y uno de sus elementos más morbosos: no es el primer personaje que se encuentra en esta situación, pero sí uno de los que más explota esta vertiente. Y, sin duda, Takahashi lo hace de una manera elegante y humorística.

Creo que no hace falta decirlo, pero Ranma 1/2 es una de las obras que todos los amantes del manga romántico y humorístico deben leer sí o sí. Rumiko sabe crear un protagonista totalmente atractivo pese a sus defectos y con el que vamos a identificarnos con gran facilidad. Además, sabe envolverlo de decenas de secundarios de lujo que hacen esta aventura aún más grande. Planeta ha recupera de una manera excelente un manga divertidísimo, picante y magnífico. Hay que leerlo sí o sí.