Y El Señor le dijo a Noé: <> De sobra es conocido este pasaje de la Biblia, el del Diluvio Universal.
Cullen Bunn (Xmen, Deadpool), acompañado de Juan Doe (American Monster) nos presenta un segundo arca, dirigida por el hechicero Shrae, nuestro protagonista, que por encargo del mismo diablo ha de poner a salvo a las criaturas del inframundo.
La idea de Dark Ark es genial, y se nota que el autor estaba entusiasmado por plasmarla en un cómic, documentándose para surtir el arca de monstruos mitológicos como los ogros, las mantícoras, unicornios, nagas, vampiros, y un sinfín de criaturas que moran en las profundidades, mezclando suspense, aventura y terror. A pesar de esto, queda un primer tomo algo atropellado, con ganas de querer contar mucho en muy poco tiempo, sin ir de manera directa por otra parte, donde te presentan múltiples personajes con enjundia pero que no les termina de sacar partido, puesto que se pisan unos a otros.
En cuanto al dibujo y la narrativa de Doe no ayudan al guión de la obra, siendo en muchos casos monótona, abusando de elementos narrativos como la voz en off como artefacto para hilvanar distintas secuencia. No obstante, podríamos destacar en este apartado los colores escogidos, dando lugar a ambientes muy diferenciados como serían por ejemplo las escenas de la familia de Shrae o las de los prisioneros humanos, de colores tristes y apagados, junto con los de los monstruos, los cuales son mucho más vivos, representando un poco el carácter histriónico de éstos.
En conclusión, un cómic con mucho potencial que no ha sabido aprovechar este primer tomo pero que te deja con ganas de más, lo cual al final es prácticamente lo que importa.
Editado por Planeta Cómic, nos trae los 5 primeros números de esta serie en un tomo cartoné de 144 páginas a color, con algunas portadas alternativas espectaculares incluidas por 14,95 €. La calidad que aporta esta editorial como de costumbre muy, muy alta.