Reseña: Tungsteno (Marcello Quintanilha)
El género de la novela negra tiene una extensa representación en el mundo del cómic. Blacksad, Dick Tracy, The Spirit, Torpedo, Sin City son sólo algunas de las obras más insignes de este género dentro del mundo de la viñeta. Todas están llenas de detectives carismáticos, ciudades sórdidas, mujeres fatales, asesinos despiadados y mafiosos sin escrúpulos son los puntos en común de todas ellas, clichés que se antojan ineludibles si se quiere tener una historia potente que encaje dentro de este género pero, y yo no soy un experto en esto, si empezamos a quitar lo accesorio, todos estos manidos estereotipos, al final el género noir en lo que se centra es en ver lo que hacen las personas ordinarias cuando una situación les empuja a tomar decisiones moralmente cuestionables.
Quizás, o eso me lo parece a mi, esto sea lo que hace tan interesante este cómic. Marcello Quintanilha crea un thriller apasionante usando precisamente todo lo opuesto a lo que esperamos encontrar en este tipo de novelas. No hay detectives fornidos, ni mujeres despampanantes, ni siquiera transcurre en una sórdida y oscura ciudad… Tungsteno se desarrolla en las soleadas playas de Salvador de Bahía, y sus protagonistas son cuatro habitantes cualquiera de esta ciudad. Cuatro personas totalmente diferentes, grises y anodinas. Ninguno de ellos es un héroe pero tampoco son completos demonios, solo personas con sus claros y oscuros. La vida hará que crucen sus caminos un caluroso día. Lo que empezará como una curiosa anécdota poco a poco irá derivando hasta llevar a cada uno de los protagonistas a una situación límite de la que no podrán escapar. Un guión que funciona como un preciso mecanismo de relojería y que ira incrementando la presión sobre los personajes, y sobre el lector, a cada página que pasa usando un tempo tremendamente calculado para hacerte preguntarte cuál será el siguiente paso darán los personajes. Pero Qintanilha no solo es un buen guionista sino que su trabajo con los lápices es también sorprendente. Sus personajes son muy realistas, los encuadres cinematográficos y la acción mostrada en toda su crudeza y violencia y como remate el uso del carboncillo y el sombreado da toda una lección de cómo usar el blanco y negro.Tras leerlo no me sorprende para nada que este cómic ya acumule media docena de premios internacionales.
ECC reedita esta obra en una edición de lujo con tapa dura, papel de gran gramaje y alguno extras como entrevistas y bocetos, nada mal por los 30 euretes que te piden por el.
De tanto jugar a videojuegos he terminado escribiendo de ellos en @noespais, hablando de ellos en @reservademana y dirigiendo y presentando La Pistacheria
