Reseña: Star Wars Objetivo Vader (VVAA)
Las historias sobre Darth Vader a veces son un arma de doble filo para los autores del universo Star Wars. Por un lado tienes al mayor caramelo en cuanto a personajes que un guionista o dibujante podría desear, pero otro lado el colosal fandom que arrastra detrás puede suponer una losa a la hora de recrear una buena historia. Imaginad ahora que esa historia cuente de cómo un grupo de cazarrecompensas se propone el objetivo que sabemos que no va a poder culminarse, de matar a Darth Vader. Pues con todo ese hándicap inicial, Objetivo Vader se ha convertido en uno de mis cómics de Star Wars preferidos de los últimos años.
El guionista Robbie Thompson construye una historia sin fijar a Vader como pilar principal, y eso que la amenazadora sombra del señor oscuro está omnipresente a lo largo de cada una de los seis números que forma este recopilatorio editado en tapa dura en nuestro país por Planeta Cómic. Esta pluma de la factoría Marvel ha recurrido al bueno de Beilert Valance, uno de los personajes más interesantes del nuevo universo expandido para crear una figura protagonista a la altura. A Balance se le puede ver en otras historias de cazarrecompensas pero Objetivo Vader sirve a la perfección como historia origen del personaje para hacernos rápidamente una idea de su aguerrido carácter y su enorme destreza como buscavidas.
En cuanto a su diseño, Valance parece estar colocado en Star Wars surgido directamente de los años 80 (y es que el personaje original ya aparecía en cómics de principios de esa década), con un look físico que recuerda al Castigador, su aspecto de rostro severo acentuado por su cabello canoso en dos tonos, tiene en sus implantes cibernéticos la nota predominante. Y es que está a medio camino entre un humano y un Terminator T-800.
El cómic es frenético y cuenta como el Imperio persigue cualquier rastro de una misteriosa organización conocida como La Mano Oculta que está vendiendo armas entre otros, a la incipiente Rebelión. Tanto es el acoso de Vader a este grupo que en un intento desesperado por librarse de sus perseguidores, contratan a un grupo de cazarrecompensas liderado por Valance para acabar de una vez por todas con el aprendiz de Palpatine.
Los personajes de este comando cazarrecompensas son muy variopintos y tendremos a viejos conocidos como Dengar entre ellos, pero también a una gamorreana, una tusken o un quariano con lo que estamos ante una auténtica ONU del gremio. Planes suicidas, intrigas, engaños y mucha acción es lo que nos ofrece este tebeo que como he dicho anteriormente sirve para recuperar el personaje de Valance y ponerlo al día explicando de dónde viene, por qué se ha forjado de esta forma y cuáles son sus afiliaciones pasadas, presentes y futuras.
En el dibujo tal vez tengamos la nota discordante ya que se ha recurrido a diferentes artistas en cada grapa. Desde Marc Laming o Stefano Landini pasando por Bolson, Failla, Di Salvo o Duarte. De igual forma con el entintado en donde figuras como Neeraj Menon o Rachelle Rosenberg encabezan otro nutrido grupo. El resultado artístico en este tomo de tapa dura es algo inconsistente, con estilos que no terminan de casar entre si y que le quitan algo de lustre en su puesta en común por sus grandes diferencias entre ellos.
A pesar de todo, Objetivo Vader nos dejará en todo momento escenas de relumbrón independientemente del estilo artístico del dibujante en cuestión, asistiendo a un gran guión a contar muchas cosas en poco tiempo. El cómic disponible por un precio de 16,95€ además incluye a modo de añadido una galería de portadas alternativas que se queda algo escueta porque ni siquiera cubre las seis grapas publicadas originalmente en 2019.
Pero en definitiva he de recomendar Objetivo Vader con toda la fuerza del lado oscuro porque muchas veces he visto como en cómics de Star Wars me daba la sensación de que no se le sacaba todo el partido posible a las viñetas. Aquí por el contrario, he sido testigo de una gran historia auto conclusiva que catapulta a Valance para que no le perdamos la pista en un futuro. Todo un manual de cómo hay que recuperar a un personaje clásico.
Miembro de Reserva de Maná, disfrutando en la mejor compañía del viaje de la vida. Profeso el Miyazakisme. El swing de la reserva.